El caso Álvarez Puga reabre la sombra sobre Osorio Chong en el desvío de Segob

La caída del llamado rey de las factureras, Víctor Manuel Álvarez Puga, ha encendido todas las alarmas políticas en Hidalgo. Su inminante regreso a México —tras ser detenido en Miami por asuntos migratorios— revive un expediente que huele a pólvora: el desvío de 2,950 millones de pesos de la Secretaría de Gobernación en 2016, cuando la dependencia estaba bajo el mando del hidalguense Miguel Ángel Osorio Chong.

La documentación fiscal obtenida por El País revela cómo se blanqueó parte del dinero proveniente de Gobernación mediante empresas fantasma vinculadas a Álvarez Puga. Y aunque el exsecretario hidalguense no aparece señalado como beneficiario directo, el fraude ocurrió dentro de su administración, en la misma oficina donde él despachaba y que coordinaba recursos destinados al sistema penitenciario federal.

El hilo que regresa a Hidalgo

La auditoría de Hacienda —realizada ya en el sexenio de López Obrador— apuntó que una firma fantasma y un prestanombres de Álvarez Puga distribuyeron 125 millones de pesos en “nómina y honorarios” a 89 personajes de élite política y empresarial. Entre los beneficiarios figuran hijos, nietos y familiares de piezas clave del PRI, PAN, PVEM y del propio Grupo Atlacomulco.

La pieza central del rompecabezas es una: los recursos salieron de Segob justo cuando Osorio Chong era el responsable político del país.

Y su nombre reaparece cada que los investigadores explican el origen del dinero.

El eslabón que incomoda

El caso revive un episodio que siempre ha generado suspicacia en Hidalgo: el ascenso meteórico de operadores federales durante el peñismo y el uso discrecional del presupuesto de seguridad. Hoy, con Álvarez Puga detenido, ese pasado vuelve a tocar la puerta del exsecretario.

La auditoría detalla:

• Que el dinero provenía de programas para mejorar la seguridad en prisiones federales.
• Que se dispersó mediante Gupea Construcciones S.A. de C.V., una empresa fachada ubicada en una vivienda humilde de San Luis Potosí.
• Que las transacciones ocurrieron entre 2016 y 2017, periodo completo bajo la responsabilidad de Osorio Chong en Segob.

Un terremoto político que apenas inicia

La captura de Álvarez Puga no solo amenaza a figuras de la farándula —como la conductora Inés Gómez Mont— sino a una larga lista de operadores que trabajaron al amparo del peñismo. Y en ese tablero, Hidalgo tiene uno de los nombres más visibles.

Si el abogado decide colaborar con las autoridades mexicanas, el caso podría convertirse en la investigación más explosiva para el legado político de Osorio Chong, quien todavía conserva influencia en la entidad y mantiene redes dentro del PRI y de estructuras locales.

Con información de El País