Tras el más reciente intercambio de prisioneros entre Israel y Hamas, varios palestinos liberados denunciaron haber sido torturados y maltratados durante su detención en cárceles israelíes, según reportó el medio Al Jazeera.

Uno de los excarcelados relató al corresponsal Tareq Abu Azzoum que la mayoría de los detenidos palestinos son torturados más de una vez al día, y que muchos resultaron heridos por balas recubiertas de goma, descargas eléctricas y golpizas constantes.

“Nos tuvieron detenidos en un matadero”, declaró uno de los prisioneros.

De acuerdo con los testimonios difundidos, las agresiones se intensificaron tras el inicio de la guerra en Gaza. Los detenidos habrían permanecido sin acceso a atención médica ni alimentación suficiente, y bajo tortura psicológica y amenazas contra sus familias.

Testimonios de hambre y abuso

El periodista palestino Shadi Abu Seido, uno de los liberados, publicó en redes sociales que pasó dos años con hambre y bajo tortura constante.

“Juro por Dios que no comemos ni bebemos, estamos enfermos, nos acechan día y noche. Todo tipo de torturas psicológicas y físicas, nos amenazan con nuestros hijos”, denunció.

En un discurso ofrecido en el Hospital Nasser de Jan Yunis, en el sur de Gaza, otro de los liberados reiteró que los prisioneros palestinos “siguen siendo valientes y firmes” pese a las condiciones en las que estuvieron recluidos.

“Sacrificamos mucho, pero nuestros sacrificios son pequeños comparados con los de otros”, dijo, al agradecer a “Dios, al pueblo palestino y a los combatientes de la resistencia” por su liberación.

El gobierno israelí no ha emitido comentarios sobre las denuncias, mientras organizaciones internacionales de derechos humanos han pedido investigaciones independientes sobre las condiciones de los prisioneros palestinos en centros de detención israelíes.