En una vivienda adaptada como templo en la colonia La Loma, al sur de Pachuca, opera desde hace varios años un recinto dedicado al culto del “Angelito Negro 666”.

El lugar es conocido entre vecinos por su actividad constante y por reunir, cada mes, a personas que acuden a realizar ofrendas y rituales.

El inmueble no está registrado oficialmente como centro religioso, pero al interior se observan figuras con cuernos, cruces invertidas, veladoras, billetes en ofrenda, esculturas pintadas de negro y objetos rituales.

Las ceremonias se realizan de manera regular los días 16 de cada mes, así como algunos viernes, sin supervisión institucional.

El llamado “Angelito Negro” es parte de un culto surgido en Pachuca hace más de una década, que ha crecido en popularidad y ha expandido su presencia hacia otras zonas, como Tepito en la Ciudad de México.

Las prácticas combinan elementos esotéricos, símbolos asociados al satanismo popular y actos como el “rayado” o corte ritual.

Durante la madrugada del 6 de julio de 2025, ese mismo templo fue escenario de un ataque contra dos agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), quienes acudieron para entregar una orden de restricción derivada de una denuncia por violencia familiar.

Ambos elementos fueron agredidos por varios sujetos al interior del inmueble. Uno de ellos falleció a consecuencia de los golpes; el otro permanece hospitalizado.

La PGJEH implementó un operativo para el rescate de los agentes, sin que hasta el momento se haya informado sobre detenciones. Las investigaciones continúan abiertas.